Club hípico y tradiciones de Bahía Murta
Río Ibáñez, Aysén del General Carlos Ibáñez del Campo

La agrupación Club Hípico y Tradiciones de Bahía Murta, nace el año 2003 por la necesidad de formalizar la práctica de las carreras a la chilena en Bahía Murta. "El 2003 es cuando se formó el Club Hípico, pero las carreras a la chilena ha sido una tradición de siempre". (M. H.).

Como nos indica Margarita Henríquez, secretaria de la agrupación, esta práctica se lleva a cabo en el sector de Bahía Murta, desde antes que se formara el pueblo antiguo, desde la época que Bahía Murta eran solo campos de familias de pobladores, las cuales vivían alejadas unas de otras y este tipo de actividad social era un punto de encuentro, entendiendo de esta forma, que este tipo de eventos, va más allá de una carrera entre dos caballos, sus jinetes y quizás los dueños de los equinos, sino que también es posible comprenderla como una actividad donde las relaciones sociales entre las familias de un territorio se dan el tiempo de reforzar sus lazos. "Antes que sea pueblo, habían puros campesinos, cada cual en sus campos, igual se reunían para las fiestas patrias, pa’ los 21 de mayo y hacían sus carreras a la chilena (...) más por eso se formó la agrupación del Club Hípico, para que no se pierda la tradición (...) es una de las actividades, yo creo que la actividad más grande son las carreras y el club de rodeo cuando hace su rodeo oficial, que son actividades que traen más gente a la localidad". (M. H.).

Contexto:


Esta manifestación se clasifica en usos sociales, rituales y actos festivos. Juegos y deportes tradicionales. La dimensión de la manifestación es educativa y comercial. Se desarrolla en diversas localidades a nivel regional y específicamente en la localidad de Puerto Ibáñez. Según Concha (2013) son también eventos considerados como relevantes para el fortalecimiento de la identidad local. Un habitante de Puerto Ibáñez impulsó la reactivación de esta actividad, que ya hacía parte de la historia de la Cuenca: “(...) Se ha retomado hace un par de años las carreras a la chilena, que antes se hacían siempre. Todas las fiestas patrias, 21 de mayo, en todas las fechas importantes se hacía carreras a la chilena y eso se perdió. Y ahora hay un poblador que retomó eso (...) Don Albino [Cea]. Y él lo está haciendo...no sé si son dos o tres años que él está repitiendo eso y le ha ido muy bien, y eso es algo que siempre se había hecho (...)” (U.F. 16/02/2013, Levicán en Concha, 2013).

Tradicionalmente, las carreras constituyen una suerte de fiesta, dado que en el marco de la competición se implementa una ramada, con música en vivo así como venta de comida y bebida. A su vez, se monta una cancha de taba donde se entretiene la gente esperando las carreras. Durante las carreras se realiza una competición principal y otras secundarias que se dan a partir de las “colleras” que se formen, es decir parejas de oponentes que se forman antes o durante el día de la carrera. En la jornada, a la que se destinan caballos reservados exclusivamente para este tipo de eventos, se realizan apuestas que permiten ganar tanto a los dueños de los caballos como a los asistentes. La gente apuesta desde pequeñas sumas variables de dinero, pudiendo llegar a montos elevados, rebaños de animales o incluso el caballo ensillado de quienes apuesten.

Práctica:


La práctica que lleva a cabo La agrupación Club Hípico y Tradiciones de Bahía Murta, principalmente tiene que ver con la producción de las carreras a la chilena que se llevan a cabo en la localidad. "Son esporádicas, se hacen en febrero, septiembre, pal 18, pal 21 de mayo, para las fechas festivas (...) incluso cualquier fin de semana se puede hacer una actividad de carrera a la chilena". (M. H.).

Estas carreras consisten en una competencia de velocidad entre dos caballos en un terreno natural, con sus respectivos jinetes quienes no necesariamente tienen que ser los dueños de los animales. A diferencia de la hípica, es que en este tipo de carreras los jinetes montan a pelo, lo que quiere decir que no utilizan la montura. Esta carrera se lleva a cabo en una cancha de carreras, la que consiste en dos huellas paralelas de aproximadamente 300 metros y son separadas por una cerca o postes. En las carreras a la chilena, participan tres personas que hacen de ministros de fe; el gritón es quien da el vamos a la carrera, el grito lo lleva a cabo sólo cuando los caballos salen parejos, el tercero es quien tiene la tarea de observar el final de la carrera y dar cuenta, previa consulta del gritón, del ganador de la carrera. El abridor es quien se encuentra a cargo de abrir los cajones, previa autorización de los paradores de los competidores, que dan su aprobación moviendo la cabeza, donde al momento se activa el mecanismo de apertura de las puertas.

Para poder llevar a cabo una carrera, las personas que vienen a correr deben acercarse al Club Hípico y hacer una escritura, que viene siendo el contrato que busca que se cumplan las reglas de la carrera. Una vez hecho el contrato se hace publicidad por la radio, buscando la asistencia tanto de personas que lleguen a apreciarlas como de apostadores. "Ellos hacen sus carreras meses antes dos meses antes y de ahí vienen a preparar sus caballos para cuando llegue el día, estén en condiciones y todo (...) se hace difusión por la radio, la hora, el día, los caballos que se cotejan y ahí la gente hace sus programas y se viene" (M. H.).

Las carreras que se inscriben se coordinan, para que sean en uno o dos días, pero siempre durante un fin de semana. En la cancha ubicada junto al aeródromo de la localidad, se da el espacio para que otras organizaciones participen ofreciendo diversos productos a los asistentes, al igual que el Club Hípico vende sus productos, para generar ingresos para la organización. Los asistentes a las carreras, vienen de toda la región dejando sin camas a la localidad, por lo que gran parte de estos, debe acampar. La idea es pasar todo el día en la cancha de carreras y que las tradiciones no se pierdan.

Fuentes:


- Concha, R. (2013). Informe Variable Patrimonio Inmaterial; Sub-etapa 1: Descripción y caracterización de las variables de la cuenca del Río Ibáñez.

  • Identificador SIGPA: CC2505
  • Documentador: Sebastián Miranda Saavedra / Ximena Mansilla Ossandón
  • Fecha de registro: 03-11-2015
  • Tipo: Cultor colectivo
  • Composición: Mixto
  • Comuna: Río Ibáñez
  • Region: Aysén del General Carlos Ibáñez del Campo
Ubicacion
Fotografías