Quién confecciona volantines es llamado volantinero, su conocimiento de la manufactura artesanal tradicional de volantines calados de papel destaca por su particular forma de trabajo y su apego a la tradición volantinera de Chile, tradición que aparece en Chile en el periodo Colonial principalmente con misioneros católicos, en particular de la orden Benedictina.

Los volantines calados son aquellos que consiste en armar la figura con trozos de papel los que deben ir cortados y pegados solo en los bordes por una franja de máximo 5mm. Los volantines cumplen su ciclo en el juego, son creados para elevarse con el viento sin saber si van a gozar de un retorno, pero ¿qué se encuentra anterior al juego? La confección. Al hacer un volantín entra en juego la composición del color y la participación del espacio que culmina en una expresión gráfica de diseño, que puede llegar a ser muy simple o complejo. Hay ciertos volantines que su tiempo de confección puede durar hasta 2 días, existen otros que solo tardan 10 minutos. La levedad del cuerpo del volantín se observa de cerca, al tacto es un objeto frágil, pero al momento de elevarlo puede resistir el mayor de los vientos sin romperse, es en el aire cuando pasa a ser otro cuerpo.

Carlos Almarza es uno de los pocos volantineros tradicionales que mantienen esta herencia antigua. Nacido en 1940 en el Puerto de Valparaíso, Almarza lleva 62 años confeccionando volantines calados de diversos diseños y colores, y de una manufactura muy fina, permaneciendo hasta ahora en Valparaíso. Vive en el sector alto de Playa Ancha. Confecciona anualmente alrededor de 3.000 volantines los que vende en el mes de septiembre para las Fiestas Patrias.

Destaca su artesanía por sus resultados: Un cuadrado compuesto por papeles cortados y pegados milimétricamente, estructurado con varillas que él mismo recolecta, corta y dimensiona. Utiliza alrededor de 20 colores, siendo su pasión la combinación de estos, cuidando que no se topen y seleccionando los opuestos para producir contrastes. En sus volantines se observan formas simétricas y asimétricas, triángulos, cuadrados, franjas, ubicadas de distintas maneras generando una infinidad de combinaciones que va variando cada año.

Hoy en día se siguen confeccionando volantines calados, pero quedan muy pocos volantineros que mantengan esta antigua técnica de confección, ya que actualmente en Chile la mayoría de los volantines son de papel estampados con serigrafía, con imprenta y stencil, y volatines plásticos.