Benito Abel Villanueva Arriagada
Valdivia, Los Ríos

Benito Villanueva tiene 61 años, vive con su esposa Norma Carrasco de 56 años y su hija de 20 estudiante universitaria. Vive en el mismo sector de sus hermanos, posee una vivienda propia y es heredero de las tierras en las que actualmente vive con sus hermanos.

El oficio de la caprintería de ribera lo aprendió al igual que la mayoría de sus hermanos, mirando a otros carpinteros de ribera, que celosamente nunca les enseñaron el oficio, si no que ellos aprendieron mirando y practicando, en un ejercicio de ensayo y error, mediante el cual lograron perfeccionar su técnica.

No solo se dedicaban a mirar a otros carpinteros de ribera, sino que también a ver distintas embarcaciones, copiando modelos y muchas veces mejorandolos.

En la actualidad Benito Abel Villanueva trabaja en conjunto con sus hermanos, a diferencia de su hermano Emilio que es el único que trabaja solo, aunque igualmente requiere de ayudantes.

Benito domina toda la labor de la carpintería de ribera, puede comenzar y terminar una embarcación sin mayores problemas ya que posee en conjunto con su hermano Emilio y Ernesto todo el conocimiento sobre el oficio de la carpintería de ribera.

Las etapas de construcción de las embarcaciones que domina son las siguientes:

1- Definición del diseño de la embarcación en conjunto con quien la solicita.
2.- Reunión de las maderas que se utilizarán en el proceso.
3.- Construcción de obra viva o el casco de la embarcación y que será la que esté en contacto directo con el agua.
4.- Unión de la quilla (columna) con la roda y los codastes de proa y de popa

La construcción de obra viva o el casco de la embarcación es lo primero que se hace y consiste en: la
selección de la quilla, roda, codastes y las plantillas adecuadas al pedido.

La unión de la quilla (columna) con la roda y los codastes de proa y de popa ayudados de las plantillas para observar su correcta ubicación y centrado. Posteriormente se instalan las cuadernas (costillas) y los tablones laterales. Durante todo el proceso se ha calculado, medido, presentado, instalado y acomodado (cepillado u otra acción) cada una de las piezas de la embarcación, las que han ido siendo sujetadas mediante prensas y sargentos, ensambladas según corresponda o clavadas y remachadas con clavos y cabezales de cobre.

Luego se procede a instalar el forro con tablas normalmente de Ciprés de las Guaitecas o macrocarpa o en su defecto otra madera nativa como Mañío. Cada pieza se introduce en sendos cilindros de fierro rellenos con agua, los que en posición diagonal son expuestos al fuego directo haciendo hervir la madera por al menos media hora. Aún calientes, se procede a colocar entre dos personas cada una de estas piezas de madera a lo largo de la estructura de la embarcación que ya posee una arquitectura y diseño definido al cual se acopla la pieza de madera, que posee ahora la flexibilidad suficiente como para seguir la horma sinuosa de la nave sin quebrarse, fijándose con clavos de cobre a la estructura base.

Una vez terminado el casco se procede al calafateo de la embarcación, que consiste en el sellado de los espacios que hayan quedado en la unión de cada pieza del forro que entrará en contacto con el agua mediante la incorporación a presión de una piola de algodón denominada pabilo. Antiguamente se utilizaba estopa de alerce para calafatear las naves. Luego del clafateo se sellan las uniones con masilla epóxica, la que una ve seca se procede a lijar y emparejar para finamente darle varias manos de pintura especial, terminando de esta forma con el sellado del casco de la embarcación.

Después de terminado este proceso comienza la construcción de la obra muerta como se denomina a todas las secciones que no están en contacto directo con el agua: cabinas, cubierta, espejo y otras. Fialmente se procede a “botar” la embarcación, es decir, llevarla e introducirla en el río por donde luego llegará a su destino final. Este proceso es siempre un evento grupal y comunitarios que va siempre acompañado de algun rito de “bautizo” de la nave y de una serie de maniobras mecánicas que permitan desplazar por tierra la nave, generalmente es tirada a pulso o con la ayuda de una yunta de bueyes. Ahora la embarcación ya está lista para el servicio.

El diseño de cada nave se realiza en función del uso al cual se destinará y las condiciones de navegación que deberá enfrentar. Para ello es fundamental la experiencia náutica de los propios maestros y de su conversación con los propios dueños de la embarcación.


La carpintería de ribera es una forma tradicional de armado de embarcaciones destinadas a diversos usos marinos y en aguas dulces más tranquilas como ríos y lagos. Existen diversas técnicas constructivas alrededor del mundo, siendo heredadas en nuestro país la tradición mapuche de construcción de wampos (especie de canoa para aguas dulce) a las que se han ido sumando ciertas tradiciones europeas (posiblemente vascas) a partir de la consquista española iniciada el siglo XVI y luego con los aportes de otros europeos. En el caso de la carpintería de ribera del Cutipay, los Villanueva reconocen una formación autodidacta, derivada de la necesidad de comunicación fluvial frente a la no existencia de caminos, con la ciudad de Valdivia como fuente aprovisionamiento de recursos y servicios. Ellos han generado y perfeccionado sus propias técnicas de armado de embarcaciones desde hace ya más de treinta años, primero fluviales y luego para uso pesquero marino por pedidos directos al difundirse la calidad de su trabajo iniciado con la población local que utiliza las embarcaciones para mantener una comunicación y transporte permanente.

Las técnicas desarrolladas incluyen el uso de maderas especiales y seleccionadas, principalmente nativas, las cuales son preparadas, labradas, dobladas, etc.con procedimientos organizados para un trabajo en equipo, etapa por etapa según los modelos de construcción establecidos por medio de plantillas a tamaño real que orientan la horma del casco de la embarcación desde su inicio.

Los Villanueva construyen embarcaciones tipo botes fluviales hasta lanchas sardineras de treinta metros de eslora, e incluso últimamente yates menores para uso recreacional en lagos del zona sur chilena.

 

  • Identificador SIGPA: CI596
  • Fecha de registro: 16-10-2013
  • Tipo: Cultor individual
  • Género: Masculino
  • Comuna: Valdivia
  • Region: Los Ríos
Ubicacion
Fotografías